Esta ciudad andaluza es la cuarta ciudad más grande de España y es también la ciudad más poblada en el sur de España. Además, es una de las ciudades más visitadas por turistas extranjeros. Tiene más de 3.000 años de historia y es, literalmente, un museo viviente, a la vista de los turistas que vienen año tras año de los cuales muchos regresan por unas merecidas vacaciones.  Un consejo… al visitar Sevilla en el verano, el calor puede ser insoportable. Es conocido por ser uno de los lugares más calientes de Europa. Pero la primavera es la estación más agradable, que es cuando aconsejamos visitar Sevilla.
 
¿Por dónde comenzar?  Es lo que usted ya debe anticipar antes de arribar a Sevilla, pues le diremos que el mejor lugar se encuentra en el casco antiguo, cerca de la catedral, desde aquí se puede caminar a la mayoría de lugares de interés.  El edificio más impresionante de la ciudad a visitar tiene que ser sin duda alguna, la catedral gótica, la cual es la más grande del mundo, la construcción comenzó en 1401. En total, la catedral alberga más de 500 obras de arte, algunas de las cuales son las más importantes en el mundo.  La torre más alta de España se encuentra en Sevilla, que se adjunta a la Catedral, La Giralda (torre morisca), con sus 319 pies de altura es símbolo de importancia en la ciudad. La torre es un antiguo alminar de la mezquita islámica y fue erigida en 1184.
 
La Torre del Oro, fue construida entre 1221 y 1222 y fue una de las últimas aportaciones de la época almohade de Sevilla. Formó parte de la última pared de defensa que abarcaba desde el Alcázar hasta el río. Se dice que obtuvo su nombre por la reflexión del sol y de sus fichas de oro que una vez cubrieron la cúpula. Hoy en día alberga el Museo Naval y todo el oro ha sido tristemente robado. (Usted lo encontrará al lado del río, cerca de la plaza de toros).

El Alcázar, es un conjunto de palacios árabes en la que la construcción comenzó en 931. Ha sido durante años la residencia de muchos monarcas. Los edificios y los jardines están rodeados por muros y con árboles de naranja.
 
La Casa de Pilatos, fue construida a finales del siglo 15 y se extendió posteriormente. El jardín arqueológico de la casa tiene algunas de las estatuas de mármol y obras de interés.

El Monasterio de la Cartuja, esta se remonta al siglo 14. El sitio fue saqueado durante la invasión francesa y los monjes fueron expulsados en 1835. Poco tiempo después se convirtió en una fábrica de cerámica.

La Plaza de Toros, es una construcción del siglo 18, también in situ está el Museo en la Plaza de Toros, el cual ofrece una visión de la historia de la tauromaquia. El comienzo de la temporada las corridas de toros se lleva a cabo el Domingo de Resurrección y termina en septiembre.
  
La Calle Feria, es una de las calles más largas de la ciudad y se ha distinguido siempre por su historia y su encanto. Todos los jueves la calle es el escenario de un mercado tradicional donde tienen puestos en función de todo, desde pinturas a las antigüedades y muebles. El mercado público también se encuentra en esta calle y es digno de una visita. Algunos de los edificios importantes en la calle son una iglesia gótica y los restos de un palacio. La feria en la calle es un buen lugar para comenzar su recorrido por la ciudad si estás de corto de tiempo.

La Plaza de España, es un lugar  que “hay que ver”  la cual se presenta con su hermosa fuente, rodeada por una gran plaza y un río artificial. Alrededor de la plaza se alza un monumento en forma de un gran semi-círculo de 200 metros de diámetro, con una torre en cada extremo. Dentro del edificio se puede visitar el espectacular patio con sus dos pisos, arcos y columnas.
 
Cerca de la plaza está uno de los lugares más hermosos de la ciudad, el Parque de María Luisa. El parque cubre unos 400.000 metros cuadrados de bosque, es un lugar ideal para llevar a la familia. Al visitar Sevilla, se debería dedicar al menos un par de horas en este lugar. Dentro del parque también se encuentran los dos museos más importantes de la ciudad.  Lo que demuestra que Sevilla tiene una riqueza de la cultura para ofrecer al visitante y la ciudad cuenta con varios teatros importantes.
 
Los museos de Sevilla también incluyen al Museo de Transporte, con una muy importante colección de transporte histórico y el museo arqueológico que se encuentra en un palacio y tiene 27 habitaciones que contienen objetos ibéricos, fenicios, cartagineses y villas romanas en torno a Sevilla. 

Las fiestas y tradiciones  con sus diferentes fechas anuales complementan el turismo en Sevilla.